A comienzos de la década de 1930 se otorgó al pisco la Denominación de Origen, ley que reservó el nombre de “pisco” a las aguardientes provenientes de las regiones de Coquimbo y Atacama, fomentando de esta manera también la asociatividad entre productores.

Nuestra historia se remonta a 79 años atrás, cuando en febrero de 1938, 25 socios conformaron la Sociedad Productora de Elqui Cooperativa Agrícola Pisquera y Vitivinícola Ltda, logrando un año más tarde conseguir la personalidad jurídica de Cooperativa Agrícola Pisquera Elqui Ltda. Desde aquellos tiempos hasta hoy, compromiso, calidad, tradición y familia, han sido los pilares fundamentales de nuestra Cooperativa.

Sin embargo, llegar hasta aquí tuvo sus obstáculos, y paradójicamente, no habría sido posible conformar esta Cooperativa sin la Gran Depresión de 1929 que golpeó duramente a Chile, provocando en los años siguientes la caída de las exportaciones generales hasta en un 83%, afectando incluso a la industria del pisco.

Frente a este escenario que parecía ser catastrófico para muchos productores, la única solución viable para sobrevivir al mal momento económico en el país, era unir fuerzas y generar asociaciones que permitieran abaratar costos de producción. De esta manera es que se conformó en el corazón de Paihuano, Región de Coquimbo, la Sociedad de Destiladores de Elqui, con un reducido grupo de productores que dieron comienzo a la gran historia y familia de la que hoy somos parte.

Un par de décadas más tarde, en 1967, se construyeron en las zonas pisqueras plantas de producción con el objetivo de fomentar la industria, esto gracias a la intervención del Estado a través de la Corporación de Fomento de la Producción. Así fue como Capel tuvo la oportunidad de comprar una de las fábricas que actualmente funciona como planta de Vicuña, potenciando también el crecimiento de la Cooperativa y sus cimientos para la internacionalización del producto local.

De esta manera, la Cooperativa ya consolidada como una sólida matriz productiva, comenzó a liderar el mercado chileno entre las décadas de los años 90 y el 2000, influyendo además las firmas de tratados de libre comercio que permitieron una apertura del pisco al mercado internacional.

Hoy la Cooperativa Capel se conforma por más de mil cooperados entre los valles de las regiones de Atacama y Coquimbo, la mayoría de ellos pertenecientes a generaciones completas de abuelos, padres e hijos, que gracias a su labor, compromiso y la calidad de sus uvas pisqueras, han posicionado a nuestra Cooperativa como la más importante del país y como una gran compañía de destilados en el mundo.